Terapia familiar


Terapia familiar psicología
El profundo gozo surge cuando algo que estaba separado, nuevamente se une y el amor vuelve a florecer
(Bert Hellinger)

La terapia familiar es un tipo de terapia psicológica que tiene como objetivo restablecer el equilibrio familiar siempre que hay conflictos, tensiones o problemas de comunicación en la familia, pero también es útil en los casos en que hay un miembro cuyo problema afecta a la convivencia con el resto de la familia.

En la terapia familiar aunque sea uno de los miembros el que presente la sintomatología no se buscan culpables, sino que se trata a la familia en su conjunto, ya que es un sistema en el que los integrantes no están aislados, al contrario, se influyen unos a otros, por lo que todos pueden contribuir a la solución.

Servirá para alcanzar nuevos puntos de vista sobre las dificultades del sistema familiar y proporcionar a sus miembros estrategias para hacerles frente y favorecer su crecimiento personal y desarrollo.

Una dinámica no saludable, no adecuada, de los vínculos y relaciones en el seno de la familia pueden estar en la base del malestar psicológico, el sufrimiento o la insatisfacción vital de muchas personas. El contexto familiar puede ser beneficioso para el desarrollo de un individuo o puede ser un factor predisponente, desencadenante y/o mantenedor de los problemas que manifiesta un miembro de una familia.

¿Cómo funciona la Terapia Familiar?

En consulta veremos las dinámicas familiares, las dificultades en la relación entre los miembros, las necesidades y demandas de estos miembros del grupo. A partir de aquí estableceremos los objetivos que se quieren conseguir, para ello trabajaremos restableciendo orden entre los miembros, mostrando estrategias para cambiar los patrones de comunicación y de conducta disfuncionales e implementando cambios positivos en la forma de relacionarse unos con otros.

El objetivo de la terapia familiar es trabajar para que una familia que no funciona sea una familia funcional, en la cual los miembros de la misma puedan crecer y desarrollarse saludablemente.

Para ello, durante las sesiones de terapia familiar, los integrantes aprenden habilidades para convivir, comprender a tolerar desacuerdos entre los miembros. Podrán superar patrones poco saludables de relación familiar, a hacer frente a situaciones difíciles de una manera más eficaz.

Cualquier cambio que se produzca en los miembros de la familia que acudan a terapia, en sus actuaciones, en sus respuestas, implicará un cambio en el resto de los componentes de la familia.

La terapia de familia se puede llevar a cabo como tratamiento específico, o como complemento beneficioso en terapias individuales o de pareja, siempre y cuando todos estén de acuerdo y dispuestos a participar.

Principales áreas de intervención

  • Dificultades de comunicación o de convivencia en la familia.
  • Problemas de conducta en niños y adolescentes.
  • Adicciones de un miembro de la familia que afecta a la armonía familiar.
  • Separación o divorcio.
  • Rivalidad o conflictos entre hermanos.
  • Conflictos entre padres/ madres e hij@s.